Aborda con simplicidad, un abanico de temas: los valores esenciales, la familia como núcleo, la amistad, el alma, la tierra de origen como proveniencia y sus marcas indelebles, la importancia de visualizar el niño interior y ponerlo a salvo frente a los temores, el planeta que habitamos y sus criaturas, la habilidad de disfrutar cada momento siendo conscientes de que es irrepetible, canalizar el dolor, las dudas y los miedos para transformar esa energía negativa y hacerla aprovechable. 

 Es un libro placentero con el que disfrutarán todos los integrantes de la familia. Aunque más que un libro es un canto a la vida, a la ilusión y a la esperanza.

Gracias a nuestros antecesores…

(…) creo que cada descendiente, lleva un poco más -en el tiempo y el espacio- la luz de sus antepasados. Gracias a esas personas que pertenecen a nuestro árbol genealógico, estamos hoy aquí. Gracias a todos y a cada uno de ellos. Hayan sido como hayan sido, nos han dado la vida y las costumbres. 

(…) 

Si negamos nuestras raíces estaremos negando parte de nosotros mismos, como si de un cuadro tapáramos un trozo: no estaríamos viendo la totalidad de lo que somos.  

Energía Pura

(…) Te aseguro que cuando uno quiere y tiene interés verdadero, los lazos no se cortan. Pueden sufrir períodos de incomunicación, falta de noticias con la horrible sensación de haber perdido el contacto y el afecto de ese ser… Pero cuando los sentimientos son profundos, la comunicación vuelve a restablecerse. 

Cuando las dos partes (o las que sean) están sólidamente cimentadas y hay interés mutuo, la relación puede acompañarnos y enriquecernos a lo largo de nuestras vidas, burlándose del tiempo y de cualquier distancia. 

(…) Llamadas, visitas, cartas, mensajes… Todas estas cosas son energía pura. 

El amor que nos brindan nuestros seres queridos, es energía que va directamente a nutrirnos el espíritu, así como la comida nutre nuestro cuerpo. 

El amor es uno de los alimentos del alma, el mejor, el que la hace fuerte y eterna… ¡Porque el amor, tampoco muere!

Un poema y otras cosas

«Dulce espera»

Opté por la vida

(un voto importante…)

Dejé que el olvido

se fuese sin prisa

y que cada pena 

deje paso libre

a nuevas sonrisas…

Dejé que las sombras

lentas, se disipasen, 

que entrase la luz, 

que todo cambiase… 

Planté mi semilla

en el mundo absurdo

tan lleno de odios*

tan loco, tan burdo… 

Dejé que los miedos

negros, se transformasen 

desde el primer instante.

Para así aferrarme 

de nuevo a la vida

¡con más fuerza que antes!

*Te voy a explicar el motivo de esos versos. La ciudad de Madrid y el mundo en general, quedaron conmovidos por un hecho muy triste que sucedió hace unos días atrás, exactamente el 11 de marzo de 2004. Cada vez que pasa algo injusto, algo feo que afecta a personas inocentes, uno suele reflexionar mucho sobre la vida, el mundo que nos rodea, los seres humanos y las intenciones que puede albergar el corazón…

Por eso, ante tanta maldad yo me he replanteado a qué mundo estaba trayéndote… Y comprendí que a pesar de todo merece la pena traer la luz de un alma pura que pueda iluminar la senda de otros, empezando por nosotros dos (quiero decir papá y yo) que fuimos iluminados por tu luz desde el momento que supimos que estabas aquí. 

Además debo decirte que en las circunstancias más complicadas y difíciles es cuando se ve la nobleza y la generosidad de las personas, que han actuado sin dudar para ayudar de la manera que han podido, a quienes estaban sufriendo. En todos los lugares del planeta suceden calamidades, pero la solidaridad de la gente es un antídoto contra tanta tristeza…

el arte de dar vida
 
Detalles del libro: «El Arte de Dar Vida»

Tapa blanda: 157 páginas

Editor: Esther Bargach (autoedición)

Año: 2012, Madrid, España

Idioma: Español

ISBN: 978-84-615-7647-0

¿Cómo surgió este libro?

Este libro fue una especie de terapia para mí cuando supe que estaba embarazada. Yo no sabía cómo canalizar tanta ansiedad, alegría, temores y nuevas sensaciones; entonces empecé a escribir todo lo que me iba sucediendo, pensamientos, sueños, expectativas.

Así nació este relato que para mí no tiene precio, pues aquí han quedado para siempre grabadas las huellas de ese tiempo tan especial.

Un tiempo que parece largo y difícil, pero que luego pasa tan rápido que vamos olvidando detalles preciosos.


No sólo para mí este libro ha sido inigualable, sino también para mi entera familia, comenzando por mi hija. Y además, para amigos y conocidos.

Ahora llega a las manos de muchas más personas que encontrarán motivos de regocijo y de reflexión en estas lecturas….Y como si todo esto fuera poco, por «El arte de dar Vida» me conocieron en Ediciones Mestas y tuve la maravillosa oportunidad de escribir mis libros de autoayuda.